A las doce de la noche de este sábado quien más quien menos estará pendiente de uno de los momentos más espectaculares del año. En tan sólo doce campanadas habremos inaugurado el 2006. Pero hacer de ese instante y de las horas previas un recuerdo especial no siempre es fácil. Las opciones para pasar la Nochevieja son variadas y, aunque seguro que la mayoría ya lo tiene decidido, aún faltan unas horas para pensar qué hacer o dónde ir.
La última noche del año siempre ha tenido un carácter festivo. Sin embargo, antes de las uvasla gente suele cenar. En muchos casos se trata de una reunión familiar en torno a un buen plato, vino y postre. El precio depende fundamentalmente de dos factores. El primero cuantas personas se reúnen en torno a la mesa, ya que podemos encontrarnos con familias que apenas son tres o cuatro miembros hasta quienes llegan a las cuarenta personas. El segundo es el tipo de productos de los que disfrutará el paladar. Eso sí, teniendo en cuenta que Lanzarote tiene la segunda cesta de la compra más cara de Canarias y que en estas fechas se suele derrochar algo de dinero, es posible que la cena tenga un precio más elevado del habitual. A lo que hay que añadir algunos extras como los dulces navideños y, en esta noche tan especial, las uvas de la suerte.
En la calle
Después de la cena lo común suele ser salir a la calle a festejar la entrada del nuevo año. Muchos comerán las uvas en casa pero otros lo harán en las plazas de sus localidades. En este sentido, en la Iglesia Guadalupe de La Villa se dan las campanadas y se brinda con champán y cotillón. A continuación hay fuegos artificiales y la noche termina con una baile hasta que la gente aguante. El municipio de Yaizalanza fuegos artificiales desde la localidad de Playa Blanca para que sus habitantes reciban el nuevo año con un gran espectáculo pirotécnico. La Avenida de las Playas de Puerto del Carmen se convierte durante esta noche tan especial en una gran fiesta. De hecho, desde las cinco de la tarde del día 31y las diez de la mañana del día 1 se cierra al tráfico esta zona desde las calle Juan Carlos I hasta la calle Anzuelo excepto para los servicios públicos y carga y descarga de mercancías que no podrán circular a partir de las seis de la tarde. En este caso la fiesta también tiene fuegos artificiales, uvas, cotillón y música para bailar hasta que el cuerpo aguante. Por último, en el municipio de San Bartolomése reúnen en la carpa ubicada en el parque Félix Rodríguez de la Fuente. Allí podrán tomar las uvas, disfrutar de la bolsa de cotillón y como no, bailar y compartir con los suyos la llegada del 2006.
Para los municipios que no celebran esta fiesta siempre queda la opción de salir a los bares y pubs de las localidades para reunirse con los amigos y despedir el año que se acaba de ir. En este caso también existen varias posibilidades. Una de ellas es salir de marcha como cualquier otro fin de semana. Claro que en este caso el handicap es encontrar grandes aglomeraciones de gente. En este sentido, los más previsores ya habrán comprado una entrada en aquellos pubs que realizan fiestas privadas. Enestos casos lo normal es pagar un precio por tener barra libre, canapés, en algunos casos bolsa de cotillón e incluso de madrugada un caldo o un chocolate con churros.
Hoteles
Durante estas fechas tan especiales Lanzarote acoge a una gran cantidad de turistas. Muchos de ellos se alojan en hoteles que preparan para esta ocasión tan especial fiestas de gala con las que hacer que sus clientes vivan una noche inolvidable. Por un lado existe la posibilidad de acudir a una cena con la consiguiente fiesta de Nocheviaje. Los precios suelen ser de entre 90 y 100 euros. Así, los menús suelen incluir platos exquisitos y sobre todo muy variados de forma que el cliente encuentre desde verduras hasta carne pasando por pescado y postres. Es más, algunos establecimientos disponen de un menú infantil e incluso vegetariano para que todos se puedan sentir integrados.Algunos hoteles también ofrecen la posibilidad de asistir únicamente a la fiesta después de las uvas. En este caso los precios rondan entre los 50 y los 70 euros dependiendo del lugar donde se quiera asistir. En cualquier caso todos ellos tratan de ofrecer buena comida y, sobre todo, que sus clientes no se olviden de una noche tan celebrada como es la que da la bienvenida al año nuevo. Hagan lo que hagan desde La Voz les deseamos un feliz año nuevo.