Política

San Ginés podría someterse a una cuestión de confianza para aprobar los presupuestos del Cabildo

El presidente del Cabildo insiste en que tienen la "mayoría real" para poder gobernar. Además de quitar competencias al Pleno, han pensado una "fórmula" para poder aprobar el presupuesto...

San Ginés podría someterse a una cuestión de confianza para aprobar los presupuestos del Cabildo

El grupo de gobierno del Cabildo está echando mano de leyes y reglamentos para afrontar la situación de minoría en la que se encuentra y la conclusión del presidente, Pedro San Ginés, es que hay "muy pocas cosas que vaya a poder bloquear la oposición". Así, además de insistir en que la Ley de Grandes Ciudades les permite aprobar la mayoría de los asuntos en el Consejo de Gobierno, sin necesidad de pasar por el Pleno, también ha desvelado que ya tienen un plan para afrontar un tema más complejo, como la aprobación de los Presupuestos.

"Existe una fórmula para aprobar los presupuestos", ha apuntado San Ginés en Radio Lanzarote-Onda Cero, sin querer dar más detalles para no dar "pistas" a la oposición. Sin embargo, aunque no ha querido concretar cuál es esa opción, el presidente podría referirse a una fórmula que contempla la Ley Orgánica del Régimen Electora General, y que implicaría someterse a una cuestión de confianza.

Esta herramienta es similar a una moción de censura, aunque quien la presenta no es la oposición, sino el propio alcalde o presidente, que se arriesga a perder su cargo. La modificación de esta ley en 1999 abrió la puerta a vincular una cuestión de confianza a temas como la aprobación de los presupuestos anuales de la institución. En ese caso, aunque el presidente perdiera la votación, la Ley establece que "se entenderá otorgada la confianza y aprobado el proyecto si en el plazo de un mes desde que se votara el rechazo de la cuestión de confianza no se presenta una moción de censura con candidato alternativo o si ésta no prospera".

En el caso del Cabildo de Lanzarote, actualmente es imposible que se presente una moción de censura, salvo que CC y PSOE rompan su alianza. Y es que la ley impide que Sergio Machín y Mónica Álvarez puedan censurar a su compañero, con lo que, sin estos dos consejeros díscolos, la oposición no tendría la mayoría necesaria para presentarla.

Así, en caso de optar por esta vía, San Ginés no tendría que dejar el cargo y podría aprobar los presupuestos aún estando en minoría. "Si la oposición tiene una alternativa al gobierno, la tiene que plantear. Y si no la tiene, tiene que aceptar los presupuestos del gobierno", se ha limitado a señalar el presidente a hablar de la "fórmula" con la que cuentan para sacar adelante los presupuestos del próximo año.

 

El primer precedente, en San Sebastián


La cuestión de confianza ya ha sido utilizada anteriormente en otras instituciones españolas para sacar adelante presupuestos por parte de gobiernos en minoría. El primero fue el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, que en 1994 recurrió a una cuestión de confianza para sacar adelante las cuentas del Ayuntamiento. En aquel momento, hace una década, diarios como El País tildaban de "excepcional", "inusual" y hasta "maestra" esta "jugada".

En la actualidad, una situación similar se está viviendo en el Ayuntamiento de Barcelona, donde el alcalde Xavier Trías también ha tenido que recurrir a esta fórmula para aprobar los Presupuestos del Consistorio. De hecho, este mismo miércoles, la Comisión de Economía del Ayuntamiento barcelonés dará inicio a los trámites correspondientes a la aprobación del presupuesto municipal para el año 2014, a través de una cuestión de confianza. Al respecto, el Partido Socialista Catalán ha declarado que la utilización de la cuestión de confianza por parte de Trías "es legal, pero democráticamente insatisfactoria". 

Además de a la aprobación de un presupuesto, la cuestión de confianza también puede vincularse a la aprobación o modificación del reglamento orgánico o del plan insular de cooperación a las obras y servicios de competencia municipal, así como "a la aprobación que ponga fin a la tramitación insular de los planes de ordenación de ámbito insular previstos en la legislación urbanística". Sin embargo, en estos casos, perder la cuestión de confianza sí supondría que el alcalde o presidente abandonara su cargo, ya que el pleno para la moción de censura se convocaría de forma automática, aunque nadie tuviera la mayoría necesaria, y él no podría ser candidato.

 

"La mayoría real sí la tengo"


"La mayoría real sí la tengo, la que no tengo es la aparente", ha insistido San Ginés en Radio Lanzarote. Así, aunque ha señalado que no renuncian "de manera definitiva a recomponer la situación anterior", con la hipotética vuelta de Sergio Machín y Mónica Álvarez a la disciplina de voto de CC, también ha dejado claro que se están preparando para gobernar en minoría.

"Yo no quiero quitar importancia a las cosas que ocurren, pero tampoco las podemos magnificar más allá de lo real", ha señalado, asegurando que no hay "parálisis" en el Cabildo. "Tenemos la mayoría real para conservar la mayor parte de las competencias en el Consejo de Gobierno", ha subrayado.

Sin embargo, sí hay temas que ha reconocido que no van a poder afrontar en minoría, como se evidenció durante el pleno extraordinario celebrado este lunes.  Entre ellos, posibles modificaciones presupuestarias, nominación de subvenciones y convenios con la comunidad autónoma, así como la aprobación del Plan Insular que está en trámite.

"Ese documento ni se puede ni se quiere aprobar sin el concurso de la oposición", ha señalado al respecto San Ginés, agregando que "aunque hubiera mayorías, lo deseable es que el Plan Insular se aprobara por unanimidad", por lo que entiende que "es un problema relativo estar o no en mayoría".

En cuanto a los convenios vinculados al Plan General de Yaiza, que también deben ser aprobados por el Pleno del Cabildo, San Ginés ha puesto la pelota en el tejado del PIL, planteando que si vota en contra "tendrá que explicarlo", porque es una alcaldesa de su partido quien gobierna en el municipio sureño y quien "trasladará esos convenios".

En cuanto al pleno ordinario que tendrá lugar a finales de este mes, tras no haberse celebrado la sesión correspondiente a octubre, el presidente ha adelantado que "algunos tendrán su gozo en un pozo, al ver que hay cosas que no pueden aprobar aunque quieran".