Primero convocaron la manifestación y luego crearon el colectivo con el que pretenden unir fuerzas para reivindicar, entre muchas cosas, un precio digno de la cesta de la compra. Este grupo de consumidores celebró este jueves una reunión para dar forma a una agrupación legal en la que no caben ideologías políticas ni intereses empresariales. Sólo la voluntad de solucionar los problemas que afectan a Lanzarote. Así se presentan, y de esta manera quedó conformada la nueva asociación.
Uno de los objetivos, la manifestación del próximo día 2 febrero. Pero será sólo uno de los síntomas de sus retos, porque entre ellos está abrir el debate del oligopolio comercial que es, según el colectivo, uno de los motivos de la carestía de la cesta de la compra.
El encuentro de este jueves sirvió además para ir elaborando el material que enarbolarán en la protesta de calle. Slóganes y pancartas que recogerán los mensajes. "Las manifestaciones sirven para crear un clima general determinado en la sociedad, y cuando llegue el momento de legislar, seguramente los políticos tendrán en cuenta ese clima por encima de las presiones empresariales interesadas. Pero la discusión está abierta", proponen desde la recién creada asociación sobre la iniciativa.
El colectivo abre sus puertas a los consumidores descontentos y promueve la participación de todos los ciudadanos en la manifestación del dos de febrero, aunque no estén asociados en la agrupación.