Los sindicatos ACAIP, CSIF y FSP-UGT con representación en Centro Penitenciario de Tahíche han realizado este jueves un encierro simbólico en el despacho del director de la prisión. Los funcionarios de la prisión lanzaroteña querían mostrar así su apoyo a sus compañeros de Madrid, que este jueves se manifestaban también, bajo el lema "Basta Ya. Tenemos derechos", para protestar "por la situación por la que atraviesa el sector".
Según explican en un comunicado, esta situación se debe "sobre todo a la deriva institucional instalada en la Administración Penitenciaria, así como la inhibición de sus máximos responsables, unida al incumplimiento de los acuerdos firmados, al impago de los salarios y a la insoportable carga de trabajo producto de la masificación".
Prueba de ello, añaden, es que el Centro Penitenciario de Tahíche se encuentra "al completo de su capacidad, lo que unido a la mala planificación en la construcción del centro, lleva consigo una gran dificultad para aplicar un tratamiento adecuado, así como para su reeducación y reinserción social por la escasez de salidas formativas y terapéuticas, llevándose a cabo determinadas actividades en barracones prefabricados que vulneran cualquier tipo de seguridad y control del funcionario hacia los internos".
"Graves fallos estructurales"
Además, señalan que "los fallos estructurales son muy graves". Un hecho que, aseguran, "ya se denunció en su día en la Inspección de Trabajo, la cual dictaminó que no podía paralizar el centro para su reforma por lo que es y representa". "Esperemos que la segunda fase todavía en construcción no sea el cúmulo de despropósitos que ha sido el actual centro", agregan.
Los sindicatos también hacen mención al Centro de Inserción Social "Ángel Guerra", el cual aseguran que se inauguró "con un recorte en la plantilla de un 30 por ciento de efectivos, con la consiguiente carga de trabajo que produce, y los graves errores que se pueden generar por la carencia de personal".
Desde los sindicatos afirman que esta situación, que se vive "en todas las prisiones de ámbito nacional", ha llevado a "la unión de todos los sindicatos del sector, ya que en la memoria llegan viejos recuerdos de tiempos muy malos, de aquellos años finales de los 80 y principios de los 90, donde las prisiones eran auténticos polvorines con motines semanales y agresiones a funcionarios a diario".
Por todo ello, los sindicatos ACAIP-USO, CC.OO, CIG, CSI-F y FSP-UGT se han dirigido al vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, mediante escrito de fecha 11 de noviembre, informándole "de forma pormenorizada" de la situación en que consideramos se encuentra la Administración Penitenciaria, al objeto de que, como máximo responsable, "ponga orden en la institución".