La Policía Local de Arrecife ha retirado a lo largo del presente año un total de 160 coches de la vía pública, iniciando durante este ejercicio 549 expedientes para la retirada de vehículos abandonados de la calle. En este sentido, el alcalde de la capital, Cándido Reguera Díaz, ha hecho un llamamiento a los propietarios de estos vehículos "para que los retiren voluntariamente o autoricen su retirada a los agentes municipales".
Reguera firmó hace unos meses un bando municipal advirtiendo a los propietarios de los vehículos abandonados de Arrecife de que serían sancionados con multas de entre 301 y 600 euros "si no retiraban voluntariamente el vehículo o autorizaban a la Policía Local a su retirada". Desde el Ayuntamiento de Arrecife se insiste en que el municipio no va a ser un "cementerio de vehículos". De esta manera, Reguera pretende responder a la demanda constante de los ciudadanos y de los colectivos vecinales que se quejan de la imagen deteriorada de los barrios por culpa "de la apatía" de los propietarios de estos vehículos.
En la actualidad, se estima que quedan más de 379 vehículos abandonados en las calles y solares de la capital que deterioran la imagen del municipio de Arrecife. A este respecto, el primer edil aclara que el objetivo de estas sanciones no es recaudatorio, sino que sirven para la concienciación de la población de la necesidad de que se retiren de las calles capitalinas estos coches abandonados.
Beneficios de la autorización del titular
Según el procedimiento para la retirada de la vía pública de un vehículo abandonado, se presumirá racionalmente el abandono cuando permanezca estacionado por un periodo superior a un mes en el mismo lugar. Desde ese momento, la Policía Local colocará en el mismo una diligencia adherida a su carrocería. "Si transcurrido el plazo de un mes el vehículo continúa en el mismo lugar,y habiendo sido notificado al propietario transcurre el plazo para la retirada sin que la haya verificado, el vehículo será retirado por la Policía Local y desechado como residuo urbano, dándose de baja por el Ayuntamiento del registro de la Jefatura de Tráfico", dice el procedimiento.
El tiempo mínimo estimado es de 50 días, salvo que el titular del vehículo firme una autorización específica, en cuyo caso la retirada es inmediata y gratuita para el propietario, al igual que sucede cuando el vehículo carezca de matrícula o signos de identificación.