Política

La Comisión de Patrimonio rechaza el Belén de Tinajo y el alcalde presentará un tercer proyecto

Los técnicos sostienen que las obras que se estaban realizando no pueden ser consideradas "efímeras", dados los materiales y el tipo de construcción, y que afectaban a la contemplación del BIC

La Comisión de Patrimonio rechaza el Belén de Tinajo y el alcalde presentará un tercer proyecto

 

La Comisión de Patrimonio del Cabildo ha rechazado el proyecto presentado por el Ayuntamiento de Tinajo para poder instalar el Belén Viviente, después de que los trabajos fueran paralizados por carecer de permiso y encontrarse en el área de influencia de un BIC. Tras la orden de Patrimonio de parar las obras y a la vista de los informes técnicos, el Consistorio anunció que modificaría el proyecto para intentar recibir autorización, pero los cambios no han sido suficientes y el alcalde, Jesús Machín, ha anunciado que presentarán una nueva solicitud.

Machín ha acudido este viernes a la Comisión de Patrimonio junto a la jurista y la arquitecta del Ayuntamiento. Y allí, tras ver que el permiso iba a ser denegado, se ha comprometido a presentar otro proyecto reduciendo el tamaño de la instalación prevista y utilizado otros materiales. 

Por su parte, en contra de lo que sostenía Machín, los técnicos del Cabildo han señalado las obras no pueden ser consideradas "efímeras", dado el tipo de material y el modo de construcción que se estaba empleando. Además, han advertido de que el tamaño y la altura  afecta a la contemplación del Bien de Interés Cultural, es decir, la Iglesia que se ubica en la Plaza de San Roque.

 

"Una altura considerable de hasta tres metros"


Según el informe de la Inspección de Patrimonio, una de las construcciones tenía "una altura de unas nueve filas de bloques (poco menos de unos dos metros aproximadamente) y una extensión aproximada de unos 25 metros cuadrados, asentándose parcialmente en zonas dedicadas a los jardines de la plaza" aunque "en una de las esquinas" se había "añadido un cubículo en una segunda altura", de forma que "la altura total de la construcción alcanzaba en este puntos unos tres metros". 

Frente a esta construcción y también "sobre zonas ajardinadas", se había levantado "otro muro longitudinal de cinco metros de largo y una altura de nueve filas de bloques, con cuatro muros perpendiculares junto a un horno de fábrica recientemente instalado". La tercera edificación, según Patrimonio, respondía "a un habitáculo de unas dimensiones aproximadas de 2x2 metros y una altura de nueve filas de bloques, frente a la cual se pudo observar dos pilares de bloques de igual altura". 

"Las construcciones observadas durante la visita no han supuesto un daño material al bien protegido. Sin embargo, presentan una altura considerable, de hasta casi tres metros a menos de 40 metros e la fachada principal del templo protegido, lo que supone un impacto y una perturbación en la contemplación del bien", se señalaba en el informe de Inspección que motivó la paralización de las obras, en el que se apuntaba además que las intervenciones habían "alterado parcialmente las zonas ajardinadas de la plaza", puesto que la mayoría se ubicaban sobre ellas, "reduciendo por lo tanto su superficie".