Política

Incumplimientos arriesgados

Una calidad decreciente que pasa por prácticas habituales como el "overbooking", los retrasos, la cancelación de vuelos o la pérdida de maletas. Esto en cuanto a lo que perciben los pasajeros, pero la otra cara de vital ...

Incumplimientos arriesgados

Una calidad decreciente que pasa por prácticas habituales como el "overbooking", los retrasos, la cancelación de vuelos o la pérdida de maletas. Esto en cuanto a lo que perciben los pasajeros, pero la otra cara de vital importancia ajena a los usuarios, como es la seguridad, también ha sufrido una merma. Es lo que han expresado, quienes lo ven, pilotos y comandantes, que en un sondeo realizado recientemente por la Universidad Rey Juan Carlos I, a petición del SEPLA, reconocen que es habitual el incumplimiento de normas en materia de seguridad operacional.

España cuenta con una exigente normativa de seguridad aérea, pero lo cierto es que algunas compañías no alcanzan esas directrices y una mayoría de pilotos encuestados aseguran que han visto en alguna ocasión falsear las hojas de capacidad máxima o sobrepasar el límite de horas de vuelos diarios.

Para la sociedad lanzaroteña, que depende del trasporte aéreo para su movilidad, el incidente ocurrido en el aeropuerto de Guacimeta en el que un avión de la compañía Air Plus Comet estuvo a punto de sufrir un accidente, que ahora investiga una, ha puesto de manifiesto la necesidad de cumplir esos márgenes, más aún cuando Air Comet es calificada por esta misma encuesta como la compañía más "insegura", seguida de Air Pullmantur y Vueling. Los pilotos y comandantes comienzan por denunciar que las inspecciones de Aviación Civil son "insuficientes".

Seguridad aérea

Cuando un accidente de aviación de Sharm el-Sheikh de 2004 causó la muerte de 148 personas, en su mayoría turistas europeos, la Unión Europea se planteó la necesidad de reforzar las normas de seguridad, entre las que se propuso que las inspecciones en pista fuesen obligatorias y se impuso a los Estados miembros participar en un mayor intercambio de datos sobre la seguridad de las compañías aéreas. Además, elaboraron una lista negra en la que aparecían las compañías que no cumplían las normas en materia de seguridad y a quienes se prohibió operar por el espacio europeo.

Lo cierto es que en España, según Sepla, se vuela en condiciones de seguridad garantizadas pero una encuesta realizada recientemente por la Universidad Rey Juan Carlos I, a comandantes y pilotos sacó a la luz cierto grado de desconfianza en el cumplimiento de las normas de seguridad por parte de las todo tipo de compañías aéreas. En el sondeo, además, se destaca que 80 de cada 100 pilotos y comandantes creen que existen redes de corrupción interna en Aviación Civil y connivencias entre algunos funcionarios y compañías aéreas. Por otra parte, parece habitual ver tripulaciones que exceden los límites máximos de actividad por incumplimientos en la programación de actividades, y el 60,4 por ciento de los pilotos y comandantes opina que esos límites se incumplen y con irregularidad. Además, cada compañía fija los límites de actividad y en el caso de los vuelos charter, como es la compañía Air Plus Comet, no existe un límite máximo.

Control de la administración

La primera de las reclamaciones del sondeo pasa por denunciar el control insuficiente que ejerce la administración pública con las compañías aéreas en materia de seguridad. El 75 por ciento de pilotos y comandantes considera que el grado de supervisión de la Dirección General de Aviación Civil es escaso. En este sentido, los expertos alertan sobre el deficiente número de inspectores, tan sólo tres, que se encargan de controlar un elevado número de operaciones aéreas diariamente por todo el territorio español.

Para conseguir que los planes de seguridad del Ministerio de Fomento sean eficaces, los pilotos apuestan por inspectores independientes de las compañías aéreas para llevar a cabo los pertinentes controles. Actualmente, el 88,4 por ciento cree que no son positivos, y cerca del sesenta por ciento los considera poco eficaces. Hoy en día, la inversión en inspección y seguridad se realiza por un grupo de comandantes, entre 60 y 65 años, que se encuentran en la reserva de las compañías. El sondeo refleja que más del 60 por ciento cree que la inversión en seguridad e inspección es baja en medios humanos y cerca de un 90 por ciento cree que es poca o ninguna la inversión en medios materiales.

Como ejemplo, la encuesta trata la incidencia de Air Madrid, compañía a la que recientemente retiraron la licencia para operar, porque existían evidencias de problemas de mantenimiento. Aunque la encuesta refleja una diversidad de opiniones con respecto a los que consideran que la medida de Fomento fue desproporcionada y otras que la califican como oportuna, el 86 por ciento apuesta por la creación de una comisión de investigación en el Congreso de los Diputados para esclarecer la situación que ha llevado a la compañía a suspender sus operaciones. Es más, en opinión de los expertos dicha comisión debería ser efectiva para sanear algunos de los actuales problemas de Aviación Civil.

Los puntos más negros del sondeo

Más del 80 por ciento de pilotos y comandantes cree que las compañías aéreas incumplen normas en materia de seguridad

- El 25% cree que frecuentemente y el 60 que alguna vez los aviones despegan con averías que impiden que el avión sea operativo (Problema llamado No Go)

- Con porcentajes similares, en torno al 20 por ciento, y al 50 y 60 por ciento, los pilotos y comandantes opinan que frecuentemente y alguna vez:

* Se falsea la capacidad máxima del avión para poder incrementar el número de pasajeros y de carga

* Se sobrepasa el límite de actividad y horas vuelo diarios y mensuales

* Creen que se vuela sin documentación correcta.

- Buena parte de los encuestados que en alguna ocasión los aviones descienden por debajo de los límites de aproximación permitidos, en los cuales se ha de vislumbrar la pista de aterrizaje. En ese instante se debe proceder a la aproximación manual para no exceder los límites. No obstante el 25 por ciento, asegura que esto "nunca sucede".

- Más del 60 por ciento manifestó que alguna vez las aeronaves aterrizan con combustible por debajo del mínimo de reserva