El vicepresidente del Gobierno de España, Alfredo Pérez Rubalcaba, informó este sábado que el Consejo de Ministros extraordinario a causa del cierre aéreo en la mayoría del país ha aprobado un decreto por el que se establece el estado de alarma. A efectos prácticos, supone que en caso de que los controladores no asistan a sus puestos de trabajo, podría ser acusado de un delito de desobediencia, tipificado en el Código Penal militar.
"A partir de ahora los mandos militares comunicarán a los controladores civiles cuáles son sus deberes", precisó Rubalcaba, quien señaló que el decreto entrará en vigor dentro de una hora.
Rubalcaba señaló que la medida será comunicada al Congreso y durará un máximo de 15 días. "Espera que no dure tanto", enfatizó el portavoz del Gobierno de España, al tiempo que señaló que "si hubiera que ampliarlo, el trámite sería distinto".