El Gobierno de Canarias está buscando soluciones para que los visitantes de los aeropuertos canarios puedan llevar en el equipaje de mano productos canarios, como vino, miel o mojos, con el objetivo de que la normativa europea para el traslado de fluidos no tenga un gran impacto en los productores canarios. Para ello, se plantea crear los mecanismos para que los establecimientos comerciales situados en los aeródromos -fuera de la zona de embarque- puedan dar la posibilidad de que los clientes recojan las compras ?mediante tickets- en una zona segura.
Otra de las soluciones que se barajan sería la de instalar tiendas en las zonas de embarque, aunque esta opción plantea problemas en algunos aeropuertos, como los de El Hierro o La Palma, donde los espacios de embarque son reducidos. También se discute la idea de solicitar que se permita facturar los productos con seguridad, mediante envases diseñados para evitar roturas.
Así lo explicaron hoy en rueda de presa el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias, Pedro Rodríguez Zaragoza, la viceconsejera de Turismo, Pilar Parejo, y la directora general de Transportes, Rosa Dávila, en un receso de la reunión que mantuvieron hoy para buscar soluciones al transporte de fluidos en los vuelos interinsulares, nacionales e interinsulares.
Rosa Dávila explicó que la Unión Europea (UE) está elaborando un reglamento que unifique las normas de seguridad entre todos los estados miembros, que ya está pactado y que recoge la posibilidad de eximir de determinadas normas básicas comunes de seguridad a algunas aeronaves en función de la naturaleza del vuelo.
DISPENSA PARA LOS VUELOS INTERINSULARES
Con ese reglamento, que se aprobará en los primeros meses de 2007, los vuelos interinsulares podrían quedar eximidos de las normas comunes, aunque para ello el estado miembro ?en este caso España- debería solicitarlo a la UE tras la realización de una evaluación de riesgo y de impacto económico.
En este sentido, Dávila explicó que durante los próximos tres meses el Gobierno de Canarias realizará un estudio para evaluar el impacto económico, social y de riesgo de absolver a los aeropuertos canarios de determinadas normas comunes. De aprobarse esas excepciones, los aeródromos canarios tendrían que contar con salas de embarque interinsulares aisladas del resto, precepto que ya cumplen todos los aeropuertos salvo el de Fuerteventura, en el que el ente Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) estaría dispuesta a afrontar los gastos.
No obstante, cualquier solución no podrá se aplicada de manera inmediata, indicó Pilar Parejo, quien anunció que Aena y Aviación Civil están desarrollando una lista para establecer qué productos son fluidos, sólidos o semisólidos, y cuáles se pueden llevar en cabina, para lo que han requerido la colaboración de todas las comunidades autónomas.
Una vez que el listado esté claro, las consejerías de Turismo y de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación desarrollarán una campaña de difusión para evitar un daño 'colateral' en las ventas, señaló Parejo.
OTRAS PROPUESTAS
En la reunión, en la que participaron también representantes de la compañía aérea Binter Canarias, se habló también de que el Estado proponga que la normativa europea se "dulcifique" o se cambie en Canarias, aunque esta propuesta fue calificada por Pedro Zaragoza como "arriesgada y difícil".
El Ejecutivo canario también ha baraja la idea de cambiar algunos elementos de los aviones como los compartimentos de cabina con cierres de seguridad para que los productos que se coloquen en los mismos no puedan ser manipulados por los pasajeros durante el vuelo. Binter Canarias ya ha mostrado su predisposición para poner en práctica esta medida, aunque tardaría meses en llevarse a cabo.
ACN Press