La reunión mantenida este martes entre la presidenta del Cabildo, Inés Rojas, y los miembros del Comité de Empresa da un nuevo impulso a las negociaciones entre la EPEL y los trabajadores de los Centros Turísticos, que ya habían amenazado con negarse a realizar servicios extraordinarios si no se "admitían sus propuestas". "Hemos decidido que se reinicien las negociaciones", ha explicado la presidenta del Cabildo. Sin embargo, la dirección de los CACTs ha aclarado que no "habían dado por cerrado el proceso de negociación" a pesar de que los trabajadores presentaron seis puntos de retribución salarial que consideraron "definitivos".
Tras varias reuniones, la cuerda se había tensado y los trabajadores habían anunciado, después del encuentro del pasado viernes, su intención de llevar a cabo medidas de presión, si antes de este miércoles la dirección de la EPEL no accedía a sus peticiones. Sin embargo, un día antes de que se cumpliera el plazo, la presidenta del Cabildo se sentó con los trabajadores de los CACTS para "reflexionar acerca de las circunstancias que concurren en esta negociación y sobre las herramientas de las que disponemos para hallar una solución".
La presidenta aprovechó la reunión de este martes para comunicarles que la Comisión Negociadora mantenía la "voluntad de seguir negociando el Convenio Colectivo en el seno de la mesa", por lo que les pidió que "aparcaran las medidas anunciadas", y les emplazó a "reincorporarse y participar". De esta manera, el próximo viernes se celebrará una nueva reunión.
No obstante, la Comisión Negociadora cree que dichas medidas se "han anunciado, una vez más,sin contar con el visto bueno conjunto de lostrabajadores". Además apunta que "en los principios y objetivos de la negociación, aprobados por el Consejo de Administración de la Entidad y presentados por la Comisión Negociadora, quedó recogido que la huelga sería el último recurso, para lo cuál se estableció la fórmula del arbitrio".