El Cabildo de Lanzarote, a través del área de Residuos que dirige Carmen Steinert, iniciará en los próximos días el primer proyecto de restauración y recuperación de espacios naturales agotados o en desuso que se llevará a cabo en la isla con materiales reciclados provenientes de residuos de construcción y demolición (RCD). En este caso concreto el de una antigua rofera agotada, propiedad del Cabildo de Lanzarote, situada en Tao, término municipal de Teguise.
El proyecto, que ha contado con un presupuesto de 186.359,46 euros, adjudicado recientemente vía concurso público a la empresa Lanzagrava, ha sido financiado por la Oficina de la Reserva de Biosfera a través del convenio 2009-2010 del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM). Esta actuación forma parte de los doce proyectos incluidos en el Programa Insular de Recuperación de Espacios Naturales Degradados que se contempla en el Avance del Plan Territorial Especial de Ordenación de los Residuos (PTEOR) de Lanzarote.
Para el caso concreto de la rofera de Lomo de San Andrés, se contabilizan en 11.418 los metros cuadrados a restaurar, de una superficie total de 12.489 metros cuadrados. Estas parcelas de terreno presentan un evidente estado de deterioro por la explotación en ellas de un depósito de "lapilli basáltico".
Reciclado de materiales
La alteración de este espacio natural puede datarse a antes de 1990, generando un impacto visual lesivo, por lo que -según explicó la consejera de Residuos de la Corporación insular, Carmen Steinert- "el Cabildo de Lanzarote, con esta importante actuación medioambiental, al tiempo que recupera un espacio paisajístico, favorece el desarrollo de una actividad muy necesaria de reciclado de materiales de construcción y demolición, actividad clave para la consecución del objetivo plasmado en el avance del PTEOR de reciclar y/o valorizar el 100 por cien de los residuos de construcción y demolición generados en la isla".
En la restauración de la antigua rofera, se emplearán materiales calificados como "residuos clasificados" (RCD), hormigón o lodos de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos, además de mezclas bituminosas de diferente índole. El material total de acopio para los más de 11.000 metros cuadrados a restaurar, será de 48.156,84 metros cúbicos. Para ello, la empresa adjudicataria dispondrá de un plazo máximo de 5 meses para realizar los trabajos de restauración.
Además de la consejera de Residuos y Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, Carmen Steinert, el acto de presentación del Plan de Restauración de la Rofera de Lomo de San Andrés, ha contado también con la presencia del consejero del área de la Reserva de Biosfera del Cabildo de Lanzarote, Juan Antonio de la Hoz, y del director insular de Residuos de la primera Corporación, José Juan Lorenzo, además de representantes de la Corporación local de Teguise y la empresa adjudicataria de la ejecución del proyecto, respectivamente.