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El grupo de teatro Ajei clausuró la IX Semana Cultural del Teatro con Sueños de una confitera

La puesta en escena de esta obra, que narra la historia de una confitera en busca de un esposo, fue muy bien acogida por el público... Vea las imágenes de la Semana del Teatro

El grupo de teatro Ajei clausuró la IX Semana Cultural del Teatro con Sueños de una confitera

FOTOS: Sergio Betancort

 

El Grupo de Teatro Ajei de San Bartolomé fue el encargado de clausurar la IX Semana Cultural del Teatro que celebraba el municipio la pasada semana. La función de Ajei tuvo lugar en la noche del pasado domingo. A las 20 horas, los miembros de este grupo de teatro se subieron a las tablas para poner en escena "Sueños de una confitera". Una vez más, el público acudió en masa, no dejando libre ni una localidad del Teatro Municipal.

La obra, dirigida por María de los Ángeles Cabrera Ferrer, contó con un numeroso elenco de actrices y actores que encarnaron con mucho desparpajo y seguridad a sus personajes. La historia que narra esta función se inicia en el interior de una confitería enclavada en el centro de la ciudad, al frente de la cual está una mujer algo entradita en años y llamada Cándida.  La suerte no había sonreído a Cándida en el amor lo mismo que al resto de sus hermanas, las cuales fueron abandonando la casa familiar en busca de un mejor porvenir y así dejar atrás la miseria en la que se encontraban.

Sin embargo, a medida que el texto va avanzando, cada vez los problemas y enredos se agolpan. La pobre Cándida se vio metida de lleno en una gran estratagema, en la que el abuelo, intentando salvar todos los obstáculos que se les presentaban, consiguió emparejarla con un adinerado joven aristócrata, hijo de una pomposa y rica duquesa que tuvo que superar bastantes problemas, aunque estos finalmente se vieron bien recompensados.

El público valoró muy positivamente la puesta en escena, los decorados y también la vestimenta, toda ella muy bien cuidada, al igual que la peluquería y maquillaje, que se dejaron notar en cada una de las escenas. Una vez finalizada la puesta en escena, todas las actrices y actores bajaron del escenario al patio de butacas y, bandeja en mano, obsequiaron al público con ricos dulces artesanales elaborados en la confería por la propia Cándida y su cómplice y querido abuelo.