Sucesos

Detenido en Canarias tras apropiarse de casi 5.000 euros en transferencias bancarias no consentidas

La Guardia Civil esclareció el delito de estafa y pudo comprobar cómo había realizado seis transferencias bancarias en el mismo día

La Guardia Civil interviene en un delito informático de estafa.

La Guardia Civil de Fuerteventura, en el marco de la operación VEGOA, detuvo el pasado lunes 26 de agosto a una persona de 29 años como presunto autor de un delito de estafa, al haber conseguido transferir desde una cuenta bancaria de una persona residente en Corralejo, la cantidad de 4967,50 euros a través de seis transferencias bancarias a su cuenta personal.

La Benemérita tuvo conocimiento a través de un ciudadano que se personó en el Puesto Principal de Corralejo el pasado 25 de julio, para denunciar los hechos. En la misma relataba que las transferencias bancarias se llevaron a cabo todas el mismo día, el pasado 3 de julio 2024, cuando desde la cuenta bancaria del denunciante se habían realizado seis transferencias bancarias sin su consentimiento, hacia otra cuenta que el mismo afirmaba no conocer ni tener relación con su titular.

El Equipo @ de la Guardia Civil de Puerto del Rosario, especializado en este tipo de actividades delictivas, inició una investigación basada en analizar la trayectoria y realizar un seguimiento del dinero que había sido transferido, descubriendo que el mismo fue desviado a una cuenta bancaria de una persona residente en la isla y con antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio, procediendo a su localización y detención.

Actualmente, la Guardia Civil continúa trabajando al objeto de esclarecer estos hechos en su totalidad para conocer como accedió ilícitamente a la cuenta del perjudicado y el delincuente ha realizado transferencias, si bien por el momento no existen más víctimas relacionadas con este tipo de estafas en la isla.

La Benemérita aconseja crear contraseñas seguras (utilizar mayús, minús, signos, etc) para evitar este tipo de estafas, así como nunca revelar datos personales, no ceder contraseñas, cambiarlas de manera periódica, nunca tener apuntado en documentos las contraseñas de estas aplicaciones.