Pese a la sentencia del TSJC, ¿usted insiste en que cumplieron todos los trámites legales para construir el restaurante?
Hace cinco o seis años, cuando decidimos hacer el proyecto de "La Ola", teníamos que presentar una documentación y nosotros presentamos todos los papeles pertinentes y una vez hubimos pagado las licencias, empezamos las obras.
Sin embargo, en la [sentencia consta->24121] que sólo presentaron una solicitud de licencia a Costas, y no para construir sino para demoler un local que ya existía en la zona, y para hacer un paseo.
Cuando se hace una obra de esa envergadura nunca se sabe cómo va a quedar al final. La piscina del café no se había puesto en un principio. Nosotros teníamos el visto bueno del Gobierno de Canarias para demoler lo que había y construir un paseo y esto es lo que hay; se demolió lo anterior y se hizo el paseo, que tiene que tener seis metros y los tiene. Porque quitas las hamacas y tienes el paseo.
Pero lo que realmente hay no es un paseo, sino la terraza de un restaurante.
Lo que dice la sentencia es que no se ha respetado el espacio de servidumbre. Y lo que dice la sentencia es que tiene que haber un paseo de seis metros y, si quitas las hamacas, el paseo ahí está. Como la piscina no estaba en el proyecto, en su momento nosotros hace dos años tramitamos la legalización de la piscina ante la Consejería de Costas del Gobierno de Canarias, y la tenemos.
Pero entre otras cosas, la sentencia sostiene que no se ha aportado a la causa ningún documento que acredite que se han obtenido nuevos permisos o que se estén tramitando. ¿Por qué no presentaron ese documento durante el proceso judicial?
Porque cuando comenzó el pleito hace cinco años no teníamos el papel de legalizado todavía. Nos lo dieron hace unos meses. La agencia del Medio Urbano y Natural dijó en su momento que no teníamos el permiso de Costas, pero cuando después se lo enseñamos, archivaron el proceso que habían abierto.
Usted sostiene que el establecimiento es legalizable, pero lo cierto es que ya la primera sentencia apunta que no lo es. ¿Cómo algo ilegalizable puede pasar a ser legalizable?
A lo mejor hace cinco años era ilegalizable pero ahora no lo es. Porque hoy hay un montón de informes y documentos que dicen que esto es legalizable al cien por cien. Pondré un ejemplo. Hubo una época en Estados Unidos en que existía la Ley Seca y no se podía beber alcohol. Incluso cuando anularon la ley, hubo individuos que tuvieron que ir a juicio por beber durante la vigencia de la normal.
¿Y qué ley ha cambiado en el caso que nos compete?
El Ayuntamiento ha aprobado un Plan General y ahí dentro se contemplan las directrices donde figura que se tiene que regularizar "La Ola". Lo que pasa es que el edificio incumple la normativa por una esquina. Para solucionar el problema de la esquina, me tengo que gastar medio millón de euros y tirar todo el costado de "La Ola", tirándolo tres metros. Y estando como están las cosas económicas ahora... Lo ideal hubiese sido que el alcalde me hubiese llamado y me hubiese dicho que habían recibido la orden judicial para cerrarme el local, y yo lo hubiese acatado. Pero ahora la situación ha cambiado porque yo he presentado el papel del linde marítimo terrestre que está en condiciones. También lo está la cara del casino que tiene los metros correspondientes y el único problema está en la cara este que da a los apartamentos. Esta fachada sí que se tiene que legalizar. Entonces, me podrían decir qué me van a dar tres años, o los que sean, para que lo legalice, porque es mejor para no tener que despedir a nadie.
¿Le parece muy dura laorden de cierre que ha decretado el Ayuntamiento?
Yo entiendo que el Ayuntamiento, por la presión recibida, me ha tenido que dar la orden de precintar pero, con las mismas, me podría decir que ahora está cerrado pero que mi edificio es legalizable, aunque hace cinco años no. Así que podría decirme que o legalizo o no puedo abrir y yo a esto les contestaría que necesitó un poco más de tiempo porque ahora mismo me supondría un dineral bestial. Hay muchas cosas que yo podría decir.
Pero precisamente, el TSJC cuestiona al Ayuntamiento por haberle dejado tanto tiempo y no haber actuado antes.
El problema viene de que se tarda mucho en tramitar las licencias. Y, aunque yo la pedí hace ocho años, empecé a construir porque sabía que tardarían mucho. Hasta que no saliese el Plan General no tendría la licencia. Me aseguraron que se aprobaría en unos meses pero pasaron tres años. Al quejarme me dicen desde el consistorio que empiece a construir porque me la iban a dar al aprobarse el Plan General, pero la aprobación tardaba. Como pasa siempre, que te dicen que se va a aprobar y que tires para adelante pero las cosas tardan. .
Sin embargo, según la sentencia, tampoco hay constancia de que usted en su día presentara la solicitud de licencia de obras al Ayuntamiento
Antes había un restaurante en el mismo sitio que también se llamaba "La Ola" y para llegar a la playa había que pasar por allí y entonces se pidió un permiso al Ayuntamiento para remodelar aquello porque estaba muy obsoleto. Y desde el Consistorio me dijeron que lo que más tenía que apurar era el tema de Costas, porque sus trámites duran mucho tiempo. Así, yo les propuse que les iba a dejar todo preparado. Entonces me puse a construir la piscina y el Ayuntamiento me dijo que no me lo podía legalizar, porque tenía que presentar a la Consejería del Gobierno de Canarias y una vez ellos me legalizasen, el Ayuntamiento también podía hacerlo.
¿Y cómo puede ser que hicieran una solicitud por escrito y no conste en la causa judicial?
¡Claro que pedí la solicitud al Consistorio! Cuando hace cinco años un particular denunció el bar, el juez me dijo que el Ayuntamiento me tenía que dar un determinado permiso. Pero el Consistorio me explicó que hasta que no se aprobase el Plan General no lo podía hacer. Esto fue hace ocho años y la obra estuvo parada tres años a la espera de la aprobación del Plan General. Pero es que yo, por motivos económicos, no podía tener esa obra parada tanto tiempo. Finalmente nos la dieron por silencio administrativo.
Yo puedo enseñar la licencia de apertura del Cabildo y por silencio administrativo del Ayuntamiento después de haberla solicitado. Y para que el Cabildo me la dé, el Consistorio tiene que informar favorablemente. Aunque en la sentencia no consté ninguna solicitud al Ayuntamiento ni licencia, yo le aseguro que sí la tengo. Es más, está pagada en el 2001.
Pero con la actual situación, ¿va a acatar la sentencia y la orden del Ayuntamiento y a precintar el local, o confía en encontrar otra salida?
La primera impresión es cerrarlo, pero yo no voy a tirar la toalla tan fácilmente. Si me llama el alcaldey me dice que me lo van a precintar, lo cierro. De hecho, ya estoy gestionando en una gestoría la liquidación del personal y los proveedores. Pero si el Ayuntamiento consigue una prórroga para mantenerlo abierto hasta que lo legalicemos, pues mantengo el empleo de los trabajadores. Es legalizable así que me tienen que dar el plazo para legalizarlo. Y no le demos más vueltas. La pena son mis trabajadores y mis proveedores, más viendo cómo están ahora las cosas. Y no me escudo en eso. Si se puede legalizar que la legalicen, y que no dejen a nadie fuera.