Seis de las ocho islas Canarias ya se han sumado a las movilizaciones contra el turismo de masas y para exigir un cambio de modelo convocadas para el próximo domingo 20 de octubre en todo el archipiélago, todas menos La Gomera y La Graciosa. La iniciativa también ha salido fuera de las fronteras isleñas y ha llegado a las ciudades de Barcelona, Madrid, Valencia, Granada y a Berlín, la capital alemana.
Entre ellas, el colectivo Lanzarote tiene un límite ha llamado a la población a movilizarse en la zona turística de Puerto del Carmen a las 12.00 horas desde la Plaza de Las Naciones, en Los Pocillos, hasta el Hotel Fariones para reivindicar medidas para cambiar el actual modelo turístico.
Así, exponen que plantean una nueva movilización después de entender que las instituciones "han ignorado" las reivindicaciones exigidas por la ciudadanía el pasado 20 de abril. "Se llenaron la boca la boca hablando de repensar el modelo, pero los problemas no han dejado de agravarse, como con los premios y distinciones e intentos de regulaciónde proyectos declarados ilegales por la Justicia". Mientras, exponen que la "mesa de expertos", promovida por el Ejecutivo regional es "un paripé", al tiempo en que han resaltado que "quienes se han beneficiado de este sistema injusto no serán quienes lo cambien".
En un manifiesto final para pedir a la población que participe en las protestas, Canarias tiene un límite ha defendido que la concentración señala al turismo por ser "el epicentro del modelo destructivo" y "porque es donde la desigualdad extrema se manifiesta con más fuerza". Además, justifican que las movilizaciones se realicen en áreas turísticas porque quieren trasladar a los turistas la situación de las islas.
¿Qué buscan conseguir con las movilizaciones?
Los colectivos convocantes en la isla de Lanzarote exponen que lo que buscan conseguir es una moratoria turística y vacacional, la paralización de los proyectos ilegales, una ley de vivienda contra la especulación, la conservación de espacios naturales, una ecotasa real, cero vertidos al mar y alcanzar la soberanía energética digna y justa.
¿Por qué los colectivos llaman a la movilización este 20 de octubre?
"Hablamos por muchos y muchas cuando decimos que echamos de menos Canarias", arrancó el manifiesto de las movilizaciones del pasado 20 de abril, donde salieron a las calles de las ocho 200.000 personas para reivindicar un modelo económico La dificultad para acceder a una vivienda, los altos índices de pobreza en las islas, la gestión del agua y el estrés hídrico, la pérdida del suelo y de costa, el crecimiento poblacional, la masificación turística, los vertidos de aguas fecales al mar, la sobrecarga de trabajo de las camareras de piso, el paro de larga duración y los índices de pobreza, la pérdida de biodiversidad y el cambio climático están entre los motivos que han empujado a diferentes colectivos a convocar nuevamente estas movilizaciones.
La llegada de turistas a Canarias está en su punto álgido. Lanzarote ha recibido entre enero y agosto de este año, 2,2 millones de turistas, lo que supone un crecimiento del 7,5% con respecto al mismo periodo del año pasado.
Según el argumentario publicado por la organizadora Canarias tiene un límite, "los turistas consumen seis veces más agua que un vecino o vecina. Consumen 800 litros por día frente a los 127 litros de los vecinos", señala haciéndose eco del estudio El Consumo responsable del agua, el gran reto del turismo.
A ello se suma otra realidad, la de los vertidos de aguas residuales al mar y las consecuencias que esto tiene para la biodiversidad de la zona: "El 72% de los puntos de vertidos de aguas residuales al mar censados en Canarias no están autorizados", expone el colectivo.
Así pues, el contexto actual en las islas está condicionado por las infracciones ambientales, con en torno a 38.000 infracciones de este tipo cometidas en el archipiélago entre 2001 y 2020.
Según estos datos, un 45,93% de los delitos ambientales están relacionados con construcciones y obras ilegales. Además de las infracciones cometidas por viajeros en espacios naturales protegidos, "los cuales en muchos casos no son sancionados".
A ello suma la actual crisis habitacional que sufren las islas, donde coexisten diferentes realidades: las viviendas vacías, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística, Lanzarote tiene 19.986 viviendas vacías; las vacacionales, que han crecido un 77% en la isla en un año y cuatro meses hasta alcanzar las 9.200 turísticas; la compra de viviendas por parte de extranjeros, que adquieren una de cada cuatro viviendas en Canarias; y el alza de los precios de la vivienda en venta y alquiler, que ha disminuido considerablemente la oferta en Lanzarote y obligan a los jóvenes canarios a gastar en el arrendamiento su sueldo completo y un 5% más.
A ello, Canarias tiene un límite suma los datos de pobreza y riesgo de exclusión en las islas. Por ejemplo, las cifras más actualizadas exponen que el archipiélago es la segunda comunidad autónoma con mayor índice de pobreza de España, con una de cada tres personas en riesgo de exclusión social.
Además, según un informe de Oxfam el 13,8% de los trabajadores canarios, dedicados a sectores como la agricultura, el trabajo en el hogar, la hostelería y la construcción, están en la pobreza.